Un alto almirante de la Armada estadounidense advirtió que el arsenal de armas de Estados Unidos se está agotando a medida que continúa enviando armas a Europa y Medio Oriente.
La administración del presidente Joe Biden ha estado proporcionando a Ucrania e Israel miles de millones de dólares en armas procedentes de conflictos estadounidenses para ayudar en la actual guerra entre Rusia y Ucrania y en el conflicto palestino-israelí.
El almirante Samuel Paparo, que dirige el Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos, dijo en un evento el martes que sería “deshonesto” afirmar que los cargamentos no utilizaban armas que pudieran usarse en otros lugares.
Paparo expresó su preocupación de que las fuerzas estadounidenses en el Pacífico pudieran verse afectadas por el despliegue de armas como misiles Patriot en el extranjero, señalando específicamente las amenazas regionales planteadas por China.
“Con algunos de los Patriots que han sido reclutados, con algunos de los misiles aire-aire, ahora se están convirtiendo en reservas, y sería deshonesto decir lo contrario”, dijo Paparo, según Reuters.
“En esencia, esto impone costos a la preparación de Estados Unidos para responder en la región del Indo-Pacífico, el teatro más crítico en términos de cantidad y calidad de municiones, como lo señaló la República Popular China. [People’s Republican of China] es el competidor potencial más capaz del mundo”, añadió.
Semana de noticias llegó al Departamento de Defensa y a la Casa Blanca por correo electrónico el martes por la noche para hacer comentarios.
Los comentarios de Paparo se producen dos meses antes de que la Casa Blanca y el gobierno federal se den la mano en la toma de posesión del presidente electo Donald Trump.
Trump y muchos de sus aliados han expresado preocupación por las amenazas de China, aunque están menos dispuestos que Biden a continuar con la ayuda militar a Ucrania. Sin embargo, el presidente electo ha dejado claro que tiene intención de seguir suministrando suministros a Israel.
Associated Press informó el martes por la mañana que la administración Biden enviaría 275 millones de dólares adicionales en armas a Ucrania, días después de que el presidente en ejercicio autorizara a Kiev a utilizar misiles de largo alcance suministrados por Estados Unidos para ataques dentro de Rusia.
Según se informa, Ucrania disparó ocho misiles del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) contra Rusia el martes, de los cuales sólo dos fueron interceptados. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que Rusia podría tomar represalias con armas nucleares si sintiera que su soberanía e integridad territorial estaban amenazadas. Sin embargo, advertencias similares iban y venían a lo largo de la guerra.
El nuevo paquete de ayuda, autorizado bajo la autoridad presidencial, incluye supuestamente sistemas de misiles de artillería de alta movilidad (HIMARS), proyectiles de artillería de 155 mm y 105 mm, misiles antiblindaje Javelin y una gama de equipos y repuestos adicionales.
Antes de la toma de posesión de Trump, la administración Biden enfrenta un plazo ajustado para acelerar la compra de armas por 7.100 millones de dólares en el Pentágono. La administración también está trabajando para pagar su parte de un préstamo de 50 mil millones de dólares a Ucrania financiado con activos rusos congelados, informó AP.