Fleming, que permaneció inexpresivo durante gran parte de la audiencia del miércoles, fue arrestado casi una semana después de que se encontró el cuerpo de Brennan.
Brennan, que enseña inglés y da tutoría a expatriados en Australia, se mudó a la calle hace dos meses y alquiló una casa de ladrillo de un piso. La noticia de su muerte conmocionó y devastó a sus antiguos alumnos y feligreses, quienes la recordaban como una maestra querida y una “segunda madre” para muchos de los que enseñó.
“Era una mujer hermosa, amable y cariñosa”, dijo entonces la exalumna Simona Croce. “Nadie merece ser tratado así, nadie.”
Mikitovich se dirigió a los familiares de Brennan que asistieron a la audiencia.
“Sólo quiero reconocer su presencia y agradecerles por venir hoy a la corte”, dijo.
La policía dice que Brennan y Fleming se conocían, pero aún no está claro cómo se llevaban.
Fleming debe comparecer ante la Corte Suprema el 28 de enero.
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