Esta tendencia se explica por el hecho de que se puede abrir una cuenta bancaria online en unos minutos. Si las cuentas están vinculadas, los fondos se pueden transferir fácilmente entre cuentas en línea.
Una encuesta reciente encontró que una de cada 10 personas (el equivalente a 2,5 millones de australianos) tiene actualmente una cuenta de ahorro separada. El cuatro por ciento de las personas solía tener una cuenta separada pero ya no la tiene.
Un estudio de Finder descubrió que guardar dinero en efectivo en una cuenta de ahorros secreta es una práctica común. Las mujeres (16 por ciento) tienen más probabilidades que los hombres (10 por ciento) de admitir que tienen o han tenido un número de cuenta bancaria secreto.
“Los australianos esconden dinero sin que su pareja o sus familiares lo sepan”, dice Rebecca Pike, experta en dinero de Finder. “Las personas hacen todo lo posible para ocultar sus ingresos y ahorros a sus parejas o familiares”.
Algunos ocultan dinero a su pareja por motivos inofensivos, como poder comprarles un regalo sin su conocimiento. Otros esconden prácticas más siniestras, como la adicción al juego o el adulterio, dice Pike.
Pero esta es una práctica poco saludable. Pike instó a las personas a ser transparentes sobre sus finanzas con sus socios.
“Ambas partes deben interesarse activamente por las finanzas del hogar; si no se siente cómodo revelando sus finanzas, probablemente no sea la relación adecuada para usted”.
Pike también instó a los titulares de cuentas a mantener sus saldos en cuentas de ahorro con intereses altos. A medida que los bancos intensifican sus medidas contra el abuso financiero, es importante recordar que mantener el dinero separado de su pareja puede constituir un abuso financiero.
El Commonwealth Bank dijo que algunas personas podrían considerar normal que las parejas compartan sus recursos financieros en beneficio de la familia, que su pareja controle sus finanzas.
Pero no es así.
Cargando
Mientras tanto, Audrey admite que los efectos a largo plazo han sido devastadores para ella. A pesar de que su marido cerró la cuenta y devolvió el dinero a la cuenta conjunta, sus sentimientos no cambiaron.
Audrey nunca ha tenido que perdonar a su pareja por algo tan grande y no sabe por dónde empezar.
Es importante comprender su motivación porque, aunque él gana más, sus hábitos de gasto siempre han sido los mismos.
“La confianza en la relación ha desaparecido”, afirma. “Actualmente estamos consultando con la esperanza de poder volver a esa página financieramente, pero sólo el tiempo lo dirá”.
* Audrey no es su verdadero nombre.