Treinta años después del asesinato del ícono tejano Selena Quintanilla-Pérez en su estado natal de Texas, su asesina, Yolanda Saldívar, de 64 años, busca libertad condicional.
Saldívar actualmente cumple cadena perpetua en la Unidad Patrick L. O’Daniel en Gatesville, Texas, a casi cinco horas de donde murió Selena en Corpus Christi. Según el Departamento de Justicia Penal de Texas, Saldívar será elegible para libertad condicional el 30 de marzo.
Saldívar era presidente del club de fans de Selena y gerente de su boutique, Selena, Inc., cuando le disparó por la espalda el 31 de marzo de 1995. Tenía 23 años cuando murió. Selena se reunió con Saldívar en una habitación de hotel para recoger los extractos bancarios desaparecidos.
Su objetivo era recuperar el control de sus finanzas a medida que las relaciones comerciales entre él, su familia y Saldívar comenzaron a deteriorarse. La familia Quintanilla acusó a Saldívar de malversación de fondos.
Años más tarde, Saldívar dijo que el tiroteo fue un accidente y que realmente quería pegarse un tiro. Saldívar también negó las acusaciones de malversación de fondos como parte de una entrevista para la serie documental Selena y Yolanda: Secretos entre ellas, que se estrena en 2024.
Bajo la jurisdicción del Departamento de Justicia Penal de Texas, el proceso de revisión de Saldívar requiere cartas de apoyo y objeción. Un oficial de libertad condicional institucional revisará estos archivos y entrevistará a Saldívar antes de preparar un resumen del caso para el panel de votación de la junta. Está previsto que la junta vote sobre el caso antes de la fecha límite de libertad condicional.
