Después de que las autoridades emitieran una “alerta de salud pública”, se advirtió a los estadounidenses que desecharan la carne de cerdo por temor a que estuviera siendo importada y distribuida ilegalmente en todo Estados Unidos.
Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria del Departamento de Agricultura de EE. UU. (FSIS) dio la alarma para siete estados el lunes luego de que se determinara que productos congelados de mortadela de cerdo listos para consumir “podrían haber sido importados ilegalmente desde Ecuador, el cual no está autorizado a exportar productos cárnicos y avícolas a Estados Unidos”. Se dice que la carne está en paquetes al vacío de 1 libra con una etiqueta que la describe como “Mortadela ESPECIAL BOLOGNIA”.
El FSIS se estableció en 1981 para proteger la salud de los estadounidenses garantizando que la carne, las aves y los huevos sean seguros para el consumo. La agencia tiene como objetivo prevenir enfermedades transmitidas por alimentos y mejorar la salud pública. Recuerda de vez en cuando si teme que el producto alimenticio pueda ser perjudicial de alguna manera. Puede emitir advertencias sobre varios productos como parte de una alerta de salud pública, como el anuncio de esta semana.
Semana de noticias se ha comunicado con la empresa exportadora Ecuatorianita Imports & Exports LLC por correo electrónico para obtener información adicional y comentarios. Sin embargo, no se esperaba una respuesta inmediata ya que se encontraba fuera del horario comercial habitual.
En este caso, el FSIS no determinó qué peligros podrían estar acechando en la mortadela, porque la calidad de la carne sigue siendo un misterio. Esto significa que, por definición, comer puede ser peligroso. Las inspecciones están diseñadas para garantizar que la carne sea segura para el consumo humano. La carne contaminada puede albergar intoxicaciones alimentarias potencialmente mortales, como salmonella y listeria.
Según el FSIS, no ha habido informes confirmados de reacciones adversas por comer carne que se cree que se originó en Ecuador, pero aquellos preocupados por la enfermedad deben comunicarse con sus proveedores de atención médica.
“Los productos que deberían llevar una advertencia sanitaria no tienen número de establecimiento ni USDA [U.S. Department of Agriculture] Una marca de inspección”, dice la advertencia del FSIS. “Estos artículos se enviaron a tiendas minoristas y distribuidores en Connecticut, Massachusetts, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y Rhode Island”.
El problema se descubrió cuando los agentes del FSIS estaban “realizando actividades de vigilancia” en el almacén y encontraron productos de mortadela a la mortadela que no tenían la marca de inspección del USDA. El incidente provocó una alerta de salud pública después de que se supo que parte de la carne ya había sido distribuida en Estados Unidos.
A los funcionarios del FSIS les preocupa que algunos de los productos ya estén en los refrigeradores de los consumidores. Se insta a los clientes que compren esta carne a no comerla; Los artículos deben desecharse o devolverse al lugar de compra.
Los consumidores que tengan preguntas sobre la alerta de salud pública deben comunicarse con Verónica Vásquez de Ecuatorianita Imports & Exports LLC al 732-309-0183 o por correo electrónico a ecuaimports1@hotmail.com.
El FSIS continúa investigando el origen de este producto y productos adicionales pueden verse afectados, según la advertencia del servicio.