En una temporada llena de errores de los Chicago Bears, la derrota del domingo en tiempo extra por 30-27 ante los Minnesota Vikings resultó crucial.
La unidad de equipos especiales de Chicago casi lo compensó esta temporada con una recuperación tardía de un balón suelto, el primero en la NFL. Un rebote empató el partido para forzar la prórroga de Cairo Santos. Pero Minnesota ganó en la sesión extra, propinándole a los Bears su quinta derrota consecutiva.
Los Vikings tomaron el control del juego por primera vez en el tercer cuarto con un despeje fallido de los Bears. Con Minnesota liderando 17-10, el especialista en devoluciones de Chicago, DeAndre Carter, perdió el balón en una devolución de despeje en la yarda 15 de Minnesota. Pero él no se extravió.
La pelota rebotó en el césped y golpeó la pierna de Carter, dándole vida. El apoyador de los Vikings, Bo Richter, saltó sobre él para tomar la posesión de los Vikings.
Cinco jugadas después, Aaron Jones amplió la ventaja de los Vikings a 24-10 con una carrera de touchdown de dos yardas. Chicago finalmente respondió con dos touchdowns en el último cuarto y un gol de campo que empató el juego cuando expiró el tiempo reglamentario.
Pero John Parker de Minnesota consiguió el lanzamiento ganador de Romo.
La derrota fue la quinta consecutiva de los Bears desde un inicio de 4-2. Es el segundo desde que el entrenador en jefe Matt Eberflus despidió al coordinador ofensivo Shane Waldron y despidió al mariscal de campo novato Caleb Williams.
La derrota también marcó la segunda ocasión consecutiva en la que un error de equipos especiales afectó el resultado del juego.
Los Bears tuvieron la oportunidad de anotar en los últimos segundos del partido del domingo pasado contra los Green Bay Packers. Pero Chicago permitió que Green Bay bloqueara el campo para asegurar una victoria de los Packers por 20-19.
Este domingo hubo más sobre equipos especiales. Y no fue sólo un despeje perdido.
Los Vikings tuvieron la oportunidad de tomar ventaja de 10-7 en la primera mitad con un gol de campo de 48 yardas de Santos. Pero por segunda semana consecutiva, los Bears permitieron un gol de campo bloqueado para empatar el juego 7-7.
Combinados con el despeje robado de Carter, los errores de los equipos especiales fueron demasiado para Chicago. Los Bears cayeron a 4-7 con la derrota, mientras que los Vikings mejoraron a 9-2. Y Eberflus enfrenta otra semana de preguntas difíciles en Chicago.